Como parte de la formación que reciben los alumnos de la Licenciatura en Gastronomía del IESEG, hace días realizaron un viaje a la ciudad de México para conocer de la festividad que se vive en Mixquic con motivo del Día de Muertos, un lugar lleno de historia que recibe a nacionales y extranjeros para mostrar orgullosamente la lumbrada, llamada así debido a que las tumbas del panteón San Andrés son iluminadas con velas y veladoras durante toda la noche del 1 de noviembre, tradición que data del siglo XIX. Mixquic también es reconocido por sus cultivos orgánicos. Previo a esto, comenzaron con un paseo en trajinera escuchando música de mariachi por los caudalosos canales de Xochimilco para conocer de la flora y fauna que abunda en la zona además de que hubo algunos valientes que se animaron a tomarse la foto del recuerdo con una pequeña víbora pitón albino, perteneciente al serpentario del lugar.
Un paseo en tranvía para admirar los edificios y monumentos históricos no podía faltar hasta llegar al reconocido Museo de Antropología e Historia, con sus diversas salas que explican la antigüedad de la tierra y el proceso evolutivo de los continentes con sus respectivas civilizaciones, las condiciones ambientales y su relación entre organismos y poblaciones, la domesticación, lenguas y aldeas así como el inicio de la colonización, sitios arqueológicos y el poblamiento de América.
Pero uno de los atractivos que sin duda llamó la atención, fue el Mercado de San Juan, uno de los pocos en su especie en el país con gran variedad de productos gastronómicos para el deleite de paladares gourmet. Desde muy temprano, los locales se encuentran abiertos, todo en perfecto orden y limpieza para comenzar con las ventas dando la opción de un rico desayuno, desde bocatas (baguette tipo torta), ceviches, cocteles o aguachiles, paella, tapas, carnes frías con una copa de vino tinto hasta hamburguesas o parrillada de carnes exóticas.
El mercado se fundó en mayo de 1955 y hoy en día se encuentra de todo, quesos finos, embutidos, fiambres y jamones ibéricos, semillas, aceites, sales, especias, productos orientales, frutas y verduras poco comunes, carne de diferentes tipos, como león, búfalo, zorrillo, víbora, cordero, armadillo, jabalí, avestruz, faisán, iguana, codorniz, cocodrilo, venado, cabrito, conejo, pavo, pato, lechón, pescados y mariscos importados, caracoles, ranas, etc., hormigas chicatanas, escamoles, gusanos de maguey, chapulines, acociles, alacranes, ciempiés, escorpiones, chinicuiles, vinagrillos, calates, shawuis, jumiles, tarántulas, cucarachas Madagascar y mucho más.
Si en tus planes no está comprar o degustar de estas delicias gastronómicas, simplemente puedes dar un recorrido y preguntar por lo que más te llame la atención, te aseguro que recibirás una explicación detallada y amable, como Don Jesús Martínez que se dedica a la venta de pescados y mariscos desde hace cuarenta y siete años y presume de sus mejores productos como el cangrejo de Alaska, sepias o el rape que es considerado el mejor pescado del mundo.
Para finalizar el viaje, visitaron el Museo Nacional del Virreinato en Tepotzotlán, degustaron de la gastronomía y disfrutaron del pintoresco lugar rodeado de puestos de artesanías y dulces típicos.
